Este domingo Lluís Torrents, presidente de la “Associació de Sales de Concerts de Catalunya” junto con Boris Revollo, médico de Can Ruti de Badalona, lo han comunicado a través del programa “Via Lliure” de la Rac1. La Sala Apolo de Barcelona programará un concierto con un aforo aproximado de 1000 personas en el que se realizarán tests rápidos para detectar el coronavirus. Los participantes deberán utilizar en todo momento mascarilla y gel hidroalcohólico pero no se pondrá límite de proximidad con otras personas.
En los días posteriores al evento se hará un seguimiento en el que se podrá analizar la eficacia de los test. Lluís Torrents asegura que esta puede ser la clave para desencallar el sector, al reactivar parte de la economía. De esta manera las salas de conciertos y otras, pueden convertirse en puntos en el que se realicen test masivos.
El proyecto es una iniciativa del hospital Can Ruti y Primavera Sound.