Nike y Martine Rose vuelven a unirse en una colaboración que desdibuja los límites entre deporte, moda y cultura digital. En esta nueva entrega, Nike x Martine Rose Sport, la diseñadora británica pone el foco en una nueva generación de atletas: los gamers. Detrás de la pantalla, el código sigue siendo el mismo —competir, resistir, superar—, pero los héroes cambian de forma.
“Cualquiera puede ser un héroe”, dice Rose. “En el gaming, la mente y la habilidad pesan más que la fuerza física”. Y es justo ahí donde construye su universo: en los espacios que la sociedad a veces margina, pero que ella eleva a categoría de arte.

La campaña es una oda al talento invisible. Entre los protagonistas aparecen SonicFox, referente no binario y siete veces campeón mundial de EVO; ANa, tricampeona de Counter-Strike; Billy Mitchell, leyenda arcade; Scarlett, pionera de StarCraft II; y TenZ, uno de los mejores jugadores de Valorant. No hay césped ni estadio, pero la épica es la misma.

En cuanto al diseño, la cápsula destila el ADN de Rose: chándales oversize, chaquetas técnicas y siluetas futboleras con un toque irónico. El rojo actúa como hilo conductor —una descarga de energía que remite a la cultura grime londinense y a los míticos fans de las Nike Shox de los 2000—. El tejido enzyme wash y los detalles envejecidos evocan ese aire vivido y real que caracteriza a la diseñadora.

El ski parka y el crossbody bag completan una colección donde la nostalgia y la tecnología se encuentran a medio camino entre un club nocturno y una LAN party. Y, por supuesto, regresa la icónica Shox MR4, ese híbrido imposible entre zapato formal y sneaker futurista, ahora en blanco y plata, además de un exclusivo rojo total disponible solo en martine-rose.com.
Lo que propone Martine Rose junto a Nike no es solo una colección: es una declaración sobre lo que significa el deporte hoy. Porque competir ya no es solo correr o saltar; también es jugar, crear y existir en nuevas arenas.