Fotografía realizada íntegramente por nuestro compañero @albertocasado11
Uno de los conciertos más esperados llega al Movistar Arena para hacernos vivir una noche única e inigualable. Con su nuevo disco PAPOTA recién sacado del horno, acompañado de su álbum hermano BAÑO MARIA, el dúo dinámico argentino formado por Paco Amoroso y Ca7riel hace estallar Madrid con un show alucinante.
La euforia que se vivió dentro del recinto fue absolutamente magnética. Desde los momentos previos a la salida de los artistas, la anticipación palpitaba en la sala: empezando con el ascenso de inflables con las caras del dúo, seguido por una entrada con potentes lanzallamas que iluminaron todo el estadio. Tras este gran comienzo, se abrió paso la primera canción de la noche: “Dumbai”, uno de sus mayores hits. A lo largo del concierto nos fueron sorprendiendo con momentos mágicos, bajo un juego de luces tenues y vibrantes que amplificaban el sentimiento de las canciones y acompañaban perfectamente a su banda.
La actuación incluyó temas icónicos como “Mi Diosa”, “Baby Gangsta”, “Impostor”, “Re Forro” y “El Día Del Amigo”, al igual que bailamos las canciones individuales de ambos artistas, como “Polvo” de Ca7riel o “Todo El Día” de Paco. Por supuesto, no podía faltar el mix conjunto “Mi deseo / Bad Bitch”, que presentaron anteriormente en su tan aclamado Tiny Desk. Dejaron a la audiencia en una locura colectiva con la perfecta dualidad de un show que alternó entre momentos electrónicos, saturados y potentes, como con “Sheesh”, y un mar melancólico de linternas que iluminaban y acompañaba al aura de ruptura durante “Pirlo”.
Fue un caos de diversión y liberación: volaron gritos, llamas e incluso camisetas que regalaron a la audiencia. Una escena performática en su totalidad, que daba inmensa energía a la atmósfera, incluyendo los estilismos de ambos artistas: lucían trajes voluminosos y musculares, haciendo un excelente guiño a la narrativa gym-bro que rodea a PAPOTA. Sin duda, un espectáculo como ningún otro, que concluyó de forma arrolladora con la popular canción “El Único”. Si quedaba alguna duda del potencial que este icónico dúo carga, esta fue la prueba definitiva de su destreza dentro de la escena musical internacional.